Las selvas tropicales ayudan a mantener el ciclo del agua

El bosque en Borneo
El bosque en Borneo

Las selvas tropicales cumplen un papel importante en el ciclo del agua, pues ellas añaden agua a la atmósfera. Las plantas liberan agua de sus hojas a través del proceso de transpiración durante la fotosíntesis. Esta humedad contribuye a la formación de nubes, las cuales posteriormente liberan el agua a través de la lluvia. En la Amazonía, entre 50 y 80 por ciento de la humedad se mantiene en el ecosistema gracias al ciclo del agua en la región.

Cuando los bosques son talados, menos humedad va a la atmósfera y disminuye la lluvia, ocasionalmente causando sequía.

En años recientes, las selvas tropicales de Borneo y la Amazonía han experimentado sequías muy severas. Estas sequías han sido agravadas por la deforestación.

La humedad generada por las lluvias tropicales circula alrededor del mundo. Los científicos han descubierto que la lluvia en el medio oeste de los Estados Unidos es afectada por ciclos atmosféricos asociados a bosques en el Congo. Mientras tanto, la humedad generada en la Amazonía puede llegar a caer como lluvia en sitios alejados como Texas. Asimismo, las selvas en el sudeste de Asia pueden influenciar los patrones de lluvia en el sudeste de Europa y en la China. Las selvas tropicales pueden beneficiar a los agricultores en muchos sitios alejados del planeta.